Entre el lunes y el martes, distintos apoderados y apoderadas llegaron caracterizados, con material didáctico y hermosas ilustraciones creadas por ellos mismos para narrar cuentos de forma lúdica, creativa y muy cercana.
Cada historia fue una oportunidad para fortalecer el vínculo entre familia y escuela, promoviendo la imaginación, el gusto por la lectura y el desarrollo del lenguaje oral desde una mirada participativa y colaborativa.
Los niños y niñas vivieron momentos únicos, atentos y entusiasmados con cada narración. Las voces, los disfraces y las imágenes diseñadas por las familias hicieron que la experiencia fuera aún más especial y significativa.
Agradecemos profundamente la disposición, dedicación y cariño de quienes aceptaron el desafío de sorprender y encantar a nuestros estudiantes con historias contadas desde el corazón.
Actividades como el «Surprise Storytelling» nos recuerdan que la comunidad educativa se construye con la participación de todos y todas, y que el aprendizaje cobra aún más sentido cuando se vive con alegría, creatividad y en conjunto.