La primera jornada del programa Kindermates fue todo un éxito. Nuestros estudiantes más pequeños compartieron una experiencia mágica con sus padrinos y madrinas de IV Medio, en un encuentro lleno de cariño, creatividad y conexión.
Desde el primer momento, se notó la emoción en ambos grupos. Los niños y niñas de niveles iniciales se sintieron felices y acompañados, mientras que los estudiantes mayores vivieron con profunda ternura este rol tan especial. La experiencia fue tan significativa, que muchos quedaron visiblemente conmovidos por el vínculo que se creó.
Durante la jornada, compartieron juegos, realizaron actividades creativas y cerraron el encuentro con una colación compartida que fue tan sabrosa como simbólica: una manera de seguir nutriendo el lazo entre generaciones que conviven dentro de nuestra comunidad educativa.
Este tipo de iniciativas no solo fortalece la convivencia escolar, sino que también enseña valores esenciales como la empatía, el cuidado mutuo y la importancia de acompañar al otro desde el respeto y el afecto.
Al finalizar la actividad, fueron muchos los niños y niñas que ya preguntaban con entusiasmo cuándo volverían a ver a sus padrinos y madrinas. Sin duda, esta es solo la primera página de una historia que continuará creciendo a lo largo del año.
En nuestra comunidad, creemos firmemente que los lazos humanos son parte fundamental del aprendizaje. Kindermates es una prueba viva de cómo el cariño y el juego pueden convertirse en herramientas poderosas para educar con el corazón.