En el Colegio Lirima, las clases de música se han convertido en un espacio vibrante y lleno de creatividad donde nuestros estudiantes pueden expresar sus emociones a través del movimiento y la exploración musical. Esta semana, los niños y niñas han estado aprendiendo sobre las diferentes familias de instrumentos, una experiencia que ha sido tanto educativa como profundamente enriquecedora a nivel emocional.

Durante estas clases, los estudiantes no solo han tenido la oportunidad de conocer y escuchar diversos instrumentos, sino que también han participado activamente en la música utilizando todo su cuerpo. A través de dinámicas de movimiento y expresión corporal.

Las clases de música también han servido como una herramienta para el desarrollo de habilidades sociales y emocionales. Al trabajar en equipo y participar en actividades grupales, los estudiantes han aprendido a comunicarse mejor, a escuchar y a respetar las expresiones y sentimientos de sus compañeros. Este ambiente colaborativo no solo enriquece su educación musical, sino que también fortalece los lazos de amistad y compañerismo dentro del aula.

Felicitamos a nuestros estudiantes por su entusiasmo y dedicación en las clases de música. Su capacidad para expresar y canalizar sus emociones a través de la música es admirable y un testimonio del poder transformador de la educación artística. 

Continuaremos apoyando y promoviendo el desarrollo artístico de nuestros alumnos, reconociendo la importancia de la música en la formación integral de cada uno de ellos.